sábado, 16 de octubre de 2010

Hace tres años, y en un momento muy doloroso y triste, creé este blog y escribí lo primero que me pasó por la cabeza, o mejor dicho, por el corazón. Y lo dejé escrito en la red, para que alguien pudiera ser partícipe de mi dolor y mi desesperanza, de mi pérdida definitiva de alguien importante que no volverá.

Y después de estos años descubro que esto que escribí sigue aqui, esperando para que yo, otra vez, le diga al mundo qué soy y como me siento. Si a alguien le importa no es relevante, lo importante es que he vuelto para afirmar y reafirmar que las pérdidas siguen vigentes pero la vida te lleva por caminos que las hacen soportables e, incluso, con alguna lección de supervivencia aprendida.

Es paradójico pensar que aquélla persona que era ya no existe, pero que, a la vez, siempre me reconoceré en los sentimientos que expresaba aquélla persona ya desconocida. Han pasado momentos buenos y otros no tan buenos, y realmente sigo aquí, todavía esperando otro campeonato del mundo de Alonso, y sin desesperar, por supuesto, pensando que este año será el año de la esperanza, en todos los sentidos.

Si alguien me lee, buenas noches...y gracias.

1 comentario:

Damon dijo...

Hola.

Yo te leo.

No es gran cosa, pero supongo que para eso se escribe.

He caído aquí por casualidad, casi no se como, leyendo los magistrales resúmenes de Vicisitud y Sordidez.

Bueno, solo dejar constancia de que tienes al menos un lector mas de los que creías, y que, en vista de que el tema del campeonato del mundo de F1 lo tenemos bastante encarrilado, el resto debería ir a la par y cumplir esas esperanzas. Al menos que ese corazón este un poco menos triste. Con eso me conformo.

Besos.