sábado, 22 de enero de 2011

Sobre los versos tristes en noche estrellada y fría

En versos como:


Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.


O como estos:

Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche esta estrellada y ella no está conmigo.


Y, por último, como estos:

Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.



De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.



Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.



Porque en noches como esta la tuve entre mis brazos,
mi alma no se contenta con haberla perdido.



Aunque este sea el ultimo dolor que ella me causa,
y estos sean los ultimos versos que yo le escribo.


Se resume la esencia del amor perdido, la lucha del alma por mantener el recuerdo, y a la vez alejarlo para apartar el dolor. Como si algo quisiéramos que quedara inmóvil, perpetuo, sin cambio, para que no parezca que pasa el tiempo y nos hacemos un día más viejos y cansados, mientras recordamos que existió en nuestras vidas la esperanza y el amor, o la simple esperanza del amor.

Y quisiéramos conseguir con el recuerdo que no llegara aquél momento en que seamos la nada, el fin, la muerte de la materia, nos quedaría algo etéreo y transparente, el recuerdo de lo que fuimos, o lo que quisimos ser, aquéllo que se nos anuncia como lo más hermoso, aquéllo que se nos enseña como lo más valioso de la vida. Pero lo más valioso de la vida es simplemente vivir.

Lo que somos ahora ya no lo seremos mañana mismo por la mañana, y el dolor de hoy ya será un recuerdo cuando salga el sol, la esperanza es siempre la de ver la luz del día pensando que el dolor y la angustia quedaron encerrados en algún sueño de la noche. Y es cierto que quedarán, lo prometo.

Decía que puedo escribir los versos más tristes esta noche, pero también digo ahora que puedo espantar los fantasmas de la tristeza esta noche, y todas las noches que me dé la vida.

4 comentarios:

Cata dijo...

Aún pudiendo escribir los versos más tristes noche tras noche, siempre es esperanzador saludar al sol con la ilusión de que cada amanecer es el prólogo de un gran día.

Me sumo a hacerlo y a aprovechar cada minuto para que el transcurrir de la jornada permita que pueda hacer un positivo repaso mental de las horas pasadas antes de acostarme.

Buena idea la de espantar los fantasmas negativos y perseguir la felicidad con convicción y perseverancia.

¡Un beso gordo y alegres pensamientos satisfactorios para cada atardecer!

Lunática Lola dijo...

Pues sí, aún en días tristes hay que pensar que todos los días sale el sol, y está en nuestra mano verlo así o verlo más negro.
Yo elijo verlo en positivo, es una elección personal, y animaría a todo el mundo a que también elija ser positivo (y mira que ahora no estoy yo especialmente bien).

Te mando también un beso muy fuerte y te deseo lo mejor (gracias por leerme, a veces pienso que no lo hace nadie, jeje)

Lola

Anónimo dijo...

siempre leo frases o poemas mas tristes, o q me dejen algun mensaje y aun se q me lastiman por pensar en esa esperanza q tengo que algun dia vuelva la persona q mas eh amado...

Anónimo dijo...

me hace mucho que pensar en q cada dia salga el sol para cada tristeza , pero pienso q para mi ya no saldra nunca mas el sol . eh vivido la mitad de mi vida pensando en el y tratando de olvidarlo ,pero ya no puedo hasta las esperanzas de q vuelva con el se esfumaron.. pero no puedo olvidarlo .gracias por escribir pensamientos q te ayudan en algun momento de la vida como es la q estoy pasando yo .... marcelo sante A.